LA LENTITUD DEL SISTEMA DE JUSTICIA, DESDE OTRO PUNTO DE VISTA

Por Abel Carreón

Siempre han existido interrogantes y desconfianza para nuestras instituciones encargadas de impartir justicia, ¿la razón? En muchas ocasiones se debe a la corrupción, a la falta de recursos e incluso a la falta de compromiso por parte de algunos servidores públicos. Estas razones han sido una constante en nuestra historia legal, pero ¿cuáles son otros motivos que han generado una lentitud visible?

Sin duda, por una lado debemos entender que el sistema legal se encuentra rebasado -por lo menos- en la Ciudad de México, la población ha incrementado de manera constante y las instituciones siguen siendo las mismas, aunado a que la falta de recursos para incrementar estos aparatos de justicia sigue estando presente. Un Agente del Ministerio Público recibe por lo menos más de 10 denuncias al día e incluso más, sin duda, es un exceso de trabajo que termina por acumularse y ahogar en papeleo a los agentes encargados -según el artículo 21 constitucional- de dirigir las investigaciones.

Ahora veamos el problema más de cerca, hablemos de un Ministerio Público el cual acude a su área de trabajo, necesita dirigir una infinidad de oficios para pedir informes relacionados a sus investigaciones, la interrogante es ¿quién los va a llevar? ¿él? Eso retrasaría el trabajo de escritorio, entonces por qué no aprovechar a los Policías de Investigación, es parte de su trabajo ¿no?, el segundo problema que se presenta es la falta de estos elementos o peor aún, la falta de patrullas para que se puedan trasladar a los lugares necesarios a los que habría que acudir para dejar los oficios del Agente del Ministerio Público.

Una vez que llega ese oficio a la institución, tenemos un tercer problema, no es el único oficio que recibe esa institución, sino que el tuyo puede ser el oficio número 10 o tal vez el 100, ¿quién y cuándo te van a responder? El tiempo continúa alargándose.

Por último, regresamos a la oficina del Ministerio Público quien ya ha recibido a más de cinco litigantes en lo que va de la mañana, uno tenía cita y los otros solo acudieron para “revisar su asunto”, ¿la consecuencia? Mayor trabajo en espera y acumulándose.

¿Cuál es el problema? ¿La incapacidad del Ministerio Público de dividirse en siete pedazos? o ¿la falta de personal para auxiliar en este tipo de tareas? Sin duda hemos venido arrastrando un sinfín de críticas a los operadores del sistema, pero esta vez quiero plantear un problema más global, la falta de personal producto de la poca atención y enriquecimiento hacia nuestras instituciones de justicia. Estamos rebasados y es una realidad, ahora con este nuevo periodo electoral uno de los principales pilares que deben fortalecer es la justicia y sobre todo, los operadores de la misma, pues como decía un ex presidente, “nadie se levanta pensando en hacerle mal a México”.

Mtro. Abel Carreón Mora

Mtro. En Derecho Procesal Penal

Abogado Titular de Regino Abogados sede Ciudad de México

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